Imaginar horizontes, compartir otras profesiones y ampliar el cine fuera de casa

Benedikt Erlingsson, Eva Valiño, Elena López Riera, Lois Patiño, Theo Anthony y el Festival l’Alternativa en la Residencia de guiones durante el mes de noviembre.

Si en octubre hablábamos de sacudir proyectos y redescubrir miradas, noviembre nos ha traído un movimiento diferente pero igualmente necesario: ampliar horizontes, poner en contacto oficios del cine y revisar desde dónde surge el cine que imaginamos. Y lo hemos hecho a través de una serie de encuentros que han ido modulando la manera de entender el proceso creativo, aportando nuevas herramientas, nuevas preguntas y nuevas formas de habitar el guion.

El mes empezó con una conexión directa con la industria gracias a la colaboración con Serielizados, que aportó una mirada concreta sobre los formatos seriados y situó a las residentes en diálogo con una parte fundamental del sector audiovisual actual. Un buen ejemplo fue el cineasta Benedikt Erlingsson, que compartió una masterclass que funcionó como un revulsivo poético y metodológico: abrió procesos, explicó decisiones creativas tomadas en momentos clave de sus proyectos y evidenció hasta qué punto un universo propio puede nacer de la combinación entre rigor e imaginación.

Pocos días después, la colaboración con L’Alternativa hizo posible una de las sesiones reveladoras del mes: un encuentro a distancia con Lizzie Borden, que aportó una mirada política y radical sobre la representación, el trabajo colectivo y los límites —o posibilidades— del cine independiente. La asistencia a diversas proyecciones del festival completó esta inmersión en otras formas de hacer, permitiendo a los y las residentes ampliar el peso de sus referentes y reconectar con la vitalidad del cine que se piensa desde la periferia.

La visita de Eva Valiño a la sede de DAMA fue uno de los puntos de inflexión del mes. La sonidista compartió maneras de pensar el sonido desde el guion, introduciendo una perspectiva que a menudo se aplica tarde, pero que, incorporada desde el inicio, transforma radicalmente la arquitectura narrativa de un proyecto. La sesión aportó herramientas y, sobre todo, visibilizó la dimensión creativa de una disciplina que atraviesa todas las capas de una película.

También en DAMA, Elena López Riera y Lois Patiño compartieron una sesión centrada en los procesos de creación, que puso sobre la mesa cuestiones esenciales sobre los tiempos, los sistemas de producción y las maneras de habitar un proyecto sin traicionar su esencia. Aportaron reflexiones sobre la constancia, la intuición y la necesidad de interrogar una industria que a menudo impone ritmos poco compatibles con la profundidad creativa, como se ve en los procesos de casting, por ejemplo. El encuentro permitió repensar no solo qué contamos, sino cómo lo contamos y bajo qué condiciones.

La última gran sesión del mes fue la de Theo Anthony en nuestra sede de la Fabra i Coats, donde compartió sus referentes, su metodología de trabajo y una manera de afrontar los proyectos que combina investigación, intuición y una conciencia muy clara del contexto social en el que crea. La conversación acabó derivando hacia la situación mundial actual y la ola reaccionaria que la atraviesa, un tema que abrió un espacio colectivo para replantear qué historias contamos y desde dónde las contamos. Y dejó claro que el cine no es solo una cuestión formal, sino también política y ética.

Siempre agradecidas por la generosidad que nos aportan estos cineastas, cerramos noviembre con la sensación de haber ampliado el mapa interno de cada proyecto e incorporado nuevas capas a la mirada creativa. Y encaramos diciembre con el mismo impulso con el que empezamos: dispuestas a seguir explorando, cuestionando y construyendo, siempre desde la generosidad y la voluntad de hacer crecer el cine que imaginamos.